El amigo José Luis Montañez, nos mandó el otro día un recorte de prensa del Canarias 7 sobre la recogida de material de los escasos elementos del monteverde y bosque termófilo que todavía quedan en los riscos de Jandía, para utilizarlos en repoblaciones forestales en la isla. Les dejo el artículo que aparece en la revista
Bienmesabe sobre esta recogida de material para la reproducción de varias especies arbóreas. Quiero hacer notar que la vegetación de la árida Fuerteventura, actualmente muy escasa, fue en un tiempo no muy lejano mucho más abundante. Como pueden leer en la revista
El Indiferente Nº 19 entre el siglo IV y VII de nuestra era habían en la isla madroños (
Arbutus canariensis) y viñatigos (
Persea indica), especies hoy desaparecidas de la isla, además de ser más abundantes especies como el laurel (Laurus novocanariensis) y el palo blanco (
Picconia excelsa), de estas especies, ya no quedaban restos en los carbones datados entre el siglo IX y XV de nuestra era. La desaparición de estas especies del monteverde y sus formaciones se debería a la fuerte deforestación que sufrió la isla por parte de la población aborigen y tal vez fue acentuado por la predación de las semillas por parte del ratón doméstico introducido con los antiguos aborígenes. Tanto las formaciones de monteverde que debieron de ser poco extensas, como los bosques termófilos sufrieron un gran retroceso en épocas prehispánicas, llegando las primeras a desaparecer en este periodo. Tras la conquista la deforestación se acentuó y el proceso de aridificación debido a la actividad humana llevó el paisaje de la isla al que actualmente conocemos. Gracias José por la información.
El amigo José Luis Montañez, nos mandó el otro día un recorte de prensa del Canarias 7 sobre la recogida de material de los escasos elementos del monteverde y bosque termófilo que todavía quedan en los riscos de Jandía, para utilizarlos en repoblaciones forestales en la isla. Les dejo el artículo que aparece en la revista Bienmesabe sobre esta recogida de material para la reproducción de varias especies arbóreas. Quiero hacer notar que la vegetación de la árida Fuerteventura, actualmente muy escasa, fue en un tiempo no muy lejano mucho más abundante. Como pueden leer en la revista El Indiferente Nº 19 entre el siglo IV y VII de nuestra era habían en la isla madroños (Arbutus canariensis) y viñatigos (Persea indica), especies hoy desaparecidas de la isla, además de ser más abundantes especies como el laurel (Laurus novocanariensis) y el palo blanco (Picconia excelsa), de estas especies, ya no quedaban restos en los carbones datados entre el siglo IX y XV de nuestra era. La desaparición de estas especies del monteverde y sus formaciones se debería a la fuerte deforestación que sufrió la isla por parte de la población aborigen y tal vez fue acentuado por la predación de las semillas por parte del ratón doméstico introducido con los antiguos aborígenes. Tanto las formaciones de monteverde que debieron de ser poco extensas, como los bosques termófilos sufrieron un gran retroceso en épocas prehispánicas, llegando las primeras a desaparecer en este periodo. Tras la conquista la deforestación se acentuó y el proceso de aridificación debido a la actividad humana llevó el paisaje de la isla al que actualmente conocemos. Gracias José por la información.
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